27 de diciembre de 2008

Vespas y Lambrettas

Lambretta fue una línea de scooter producida en Milán, Italia desde finales de la década de 1940 por la compañía Innocenti.
Junto con la Vespa
este vehículo fue un icono de los años 50 y 60 cuando fue adoptado en el Reino Unido por la cultura juvenil de los mods y más tarde por los skinheads.
La Lambretta posee un chasis tubular a diferencia de la Vespa que es un monocasco prensado con láminas de acero. Los primeros modelos se ofrecían en dos versiones: «cerrada» (con toda la parte mecánica cubierta) o «abierta» (los paneles mínimos y un aspecto de extraña motocicleta), pero el mayor éxito de la versión «cerrada» confirmó que los conductores necesitaban una cierta protección contra las inclemencias del tiempo y un aspecto más limpio de la escúter.
Tienen cambio manual, controlado con el puño izquierdo mientras se sujeta el embrague, situado en el mismo puño, seleccionando entre 3 ó 4 velocidades, dependiendo del modelo. Tienen un
motor de dos tiempos, y requieren que la gasolina esté mezclada con aceite para lubricar el pistón y el cilindro. La mezcla de aceite y de gasolina produce cierta cantidad de humo.
La Lambretta, a diferencia de la Vespa, que tiene el motor lateral y trasero (adosado a la rueda), lo tiene en el centro de la moto, lo cual le da mayor equilibrio lateral (la Vespa pesa más de un lado que del otro) como un mejor reparto del peso entre las ruedas (más agarre en la delantera), sin embargo, para alojar el motor en el centro era necesario una mayor distancia entre ejes que hace que sea menos maniobrable en ciudad.
Innocenti cesó la producción en
1971, pero se continuaron fabricando bajo licencia en Eibar (España) e India.
El nombre Lambretta proviene del nombre de un pequeño río, el
Lambro en Milán, cercano a la factoría.
Vespa presentó los primeros 15 modelos en abril de 1946 en el Club de Golf de Roma. Los padres de la nueva moto eran el empresario Enrico Piaggio y el ingeniero aeronáutico Corradino D'Ascanio. Al terminar la Segunda Guerra Mundial, Piaggio tuvo la visión de un medio de transporte cómodo, de fácil manejo y barato. Piaggio encarga un primer proyecto al ingeniero Renzo Spoli, en el que el nuevo vehículo recibe el nombre de Paperino, que significa patito en italiano, con un diseño inspirado en las motocicletas plegables utilizadas por los paracaidistas ingleses. El proyecto del primer prototipo no convenció a Piaggio y recurrió al ingeniero aeronáutico Corradino D'Ascanio. El ingeniero, al que le gustaban más los aviones que las motos, diseñó un vehículo de aspecto revolucionario para su época: puso el motor sobre la rueda posterior e ideó el brazo delantero pensando en el tren de aterrizaje de un avión. Cuenta la leyenda que, cuando Piaggio la vio, exclamó: «Bello, sembra una vespa» (Bello, parece una avispa, en italiano), aludiendo a la forma del vehículo: parte trasera más gruesa conectada a la parte frontal por una cintura delgada, y el manillar como las antena.
Piaggio continúa manufacturando hoy la Vespa, aunque la Vespa era un vehículo mucho más prevalente en los cincuenta y sesenta al ser la elegida por la cultura juvenil del Reino Unido conocida como Mods, y más tarde Skin heads. Las clásicas Vespas tenían chasis unicorporal prensado de láminas de acero, con carrocería cubriendo las piernas para protegerlas de la lluvia y el barro. El motor estaba cubierto completamente por un encapuchado de acero para proteger del calor. Piaggio revolucionó la industria de dos ruedas con la Vespa y produjo un modelo en el que prácticamente todos los demás escúteres se han basado desde entonces.

*Info de Wikipedia y imágenes de Scooter Run León

1 comentario:

Unknown dijo...

En manos tuyas, una Lambreta o una Vespa serían carne de cañón del parking del 47A de la rue de Saint Joseph y tu corner privado empieza a ser un tetris difícil de resolver.